En AGILBIZ teníamos muy claro que nuestra app debía gestionarse completamente desde el móvil de manera ágil y sencilla, evitando la instalación de aparatosas terminales en nuestras empresa adheridas. Con estas premisas, no tenía sentido el uso de códigos QR. Por tanto, hemos prestado especial atención a la usabilidad, desarrollando nuestra app de manera que cualquier acción se realice de forma directa con unos pocos clics. Además, este principio no solo lo hemos aplicado teniendo en cuenta al cliente que usa la app, sino también a la empresa que la contrata y emplea las herramientas que le aportamos para ello.

Para los despitados que aún no sepan en qué consiste un código QR, se trata de un pequeño gráfico cuadrado en negro y blanco, que en muy poco espacio ofrece información completa de interés para los usuarios de móvil. Sin embargo, el proceso puede considerarse algo laborioso, ya que para acceder a loss textos, páginas webs, números de teléfono, etcétera que presenta un código Qr, es necesario descodificarlo con la cámara de un dispositivo móvil.

No hace muchos años que el código QR estaba de moda, pudiéndolo encontrar en anuncios, locales comerciales abiertos al público e incluso en el envase de algunos productos. Pero donde las empresas vieron una oportunidad para dar valor añadido a sus clientes, entre los éstos no tuvo tanto éxito. De hecho, una encuesta realizada en 2013 en EEUU demostró que sólo un 21% de los usuarios de móvil habían escaneado un código QR en alguna ocasión.

Piénsalo bien: ¿Has escaneado alguna vez algún código QR? ¿Cuántas veces?.  Pues no hay más que decir. Prueba nuestros servicios durante un mes gratis registrándote en nuestra web o descárgate nuestra app en Google Play.

¡Agilbízate!